Segundo día de Conferencia Internacional dedicado al Oso andino

El uso del hábitat, los conflictos con las comunidades, la genética, la ecología, su conservación, su localización fueron los ejes en los que se desarrolló el segundo día de conferencia, esta vez dedicado al Oso Andino, uno de los ocho especies de osos de los que se habla en XXV Conferencia Internacional de Osos que se efectúa en nuestra ciudad.

El oso andino u oso de anteojos es una especie endémica de los Andes Tropicales, y es el único representante de la familia Ursidae en América del Sur. Se encuentra distribuido en seis países: Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y el norte de Argentina.

“Hacia el sur: el oso más austral del mundo, en un ambiente de contraste” fue el tema que desarrolló Fernando del Moral, argentino, uno de los expositores la mañana de este martes 14 de noviembre.

Miembro de la Fundación Felihazara de Argentina, señaló que desde el 2005 vienen investigando la situación del oso en su país. “El oso andino es una especie muy interesante, no solo para Ecuador sino para todos los países de América Latina”. Es muy interesante todo el misterio que guarda, desde el cambio ambiental que ha habido en el continente desde finales del pleistoceno y que estamos viviendo estos procesos de cambio ahora, y cómo se ha adaptado al ambiente. “El uso que nosotros hacemos de los recursos, del agua, y todo lo demás, y cómo el oso andino responde a toda esa dinámica” concluyó.

Samuel Rodríguez de Colombia, conversó sobre “Uso de hábitat por parte del oso andino en la zona de amortiguamiento de un área protegida en la Cordillera Oriental de Colombia”, el trabajo que realizan para conocer cómo se desarrolla, su localización, su hábitat. Para Samuel Rodríguez “la realización de la conferencia es una ventana grande para mostrar qué es lo que está pasando a nivel mundial y compararlo con otros lugares, y obviamente, la producción científica que se tiene que realizar, da mucho valor al trabajo realizado”.

La creación de un corredor del Oso en el Ecuador, su necesidad geográfica fue tratada por Diana Paredes. Uno de los resultados de sus estudios señala que solo el 23% de las zonas ocupadas por el Oso Andino son áreas de protección.

La deforestación de bosques debido a la ampliación de la frontera agrícola y agropecuaria, el uso desordenado del suelo provocando la fragmentación y pérdida del hábitat de los osos, tenencia informal de la tierra, la Cacería, la presencia de barreras artificiales como la carretera Calacalí – Nanegalito, que limitan el normal movimiento de osos y otros mamíferos grandes, repercutiendo a futuro en la dispersión e intercambio genético entre individuos de sub poblaciones, son algunas de las amenazas que los gobiernos regionales y locales deben enfrentar.