Los dulces viven su fiesta en el Museo de la Ciudad

Festejar a Quito por sus 487 años es uno de los objetivos de la ‘Fiesta de los Dulces’, feria organizada por el Museo de la Ciudad que se realiza, desde el jueves 2 hasta el lunes 6 de diciembre, de 09:00 a 16:00. La entrada a esta actividad es gratuita.

Champús, chicha de jora y morocho, dulces de maní, de leche, de higos, habas y maní enconfitados, mistelas, turrones, espumillas, obleas con dulce de leche, raspados, chocolates, quesadillas, moncaibas, suspiros, pastelitos de maduro, empanadas de morocho, de viento, tamales de pollo y muchas más golosinas para el disfrute de quienes lleguen hasta el Patio Contemporáneo y el mirador del Museo de la Ciudad.

Amira Espinoza, responsable de operaciones del Museo de la Ciudad, señala que esta iniciativa beneficia a 20 emprendedores. La feria inició en 1999. “Esta es la vigésima segunda edición, el museo busca rescatar el patrimonio inmaterial gastronómico, mediante los dulces tradicionales”. Estos emprendedores, por 2 años, han parado sus actividades, por la pandemia, ahora regresan a festejar a Quito.

Los emprendedores que participaron recibieron capacitación de la Agencia de Regulación y Control Sanitario. “Esta fecha es muy oportuna para visitar el Centro Histórico, recorrer nuestros museos y los centros culturales y disfrutar de la memoria culinaria de nuestra ciudad, a través de los dulces de Quito”, reitera Amira Espinoza.

Graciela Campaña, con su emprendimiento ‘Golosinas de mi Tierra’, una de las emprendedoras que es parte de esta Feria desde la primera edición, deleita los paladares de los visitantes con tamales de gallina, empanadas de morocho y el tradicional ‘Rosero Quiteño’.

“Esta es una bebida que viene desde la colonia, la receta la encontré en un libro de historia, se servía en los bautizos, primeras comuniones. Se colocaba en grandes poncheras. Se usan frutas cocinadas y crudas, tiene mote, aguas frescas y vino. Los jóvenes deben dejar de comer salchipapas, hamburguesas que lindo que fuera que consumieran rosero, tamalitos, tiene vitaminas. Estas son cosas que no se quieren que se pierdan, que degusten la comida quiteña”.

Otro de los participantes es Javier Peñafiel, él pertenece a la tercera generación de dulceros de Quito. Elaboran turrones de maní, dulce de leche, maní, habas e higos enconfitados y los ‘borrachito’ que contienen chocolate, coco y vino. Sus productos tienen un valor de 50 centavos.

“Usamos pailas de bronce, leña, todo artesanalmente. Estos son productos quiteños y no queremos que se pierda esta tradición que los jóvenes y los adultos vengan a probar estas delicias”, dijo Javier Peñafiel.

Los visitantes pueden recorrer los 20 emprendimientos, descubrir y saborear delicias diferentes.

Delia Calderón elabora las mistelas: dulces que tienen en su centro licor de pájaro azul, amareto, whisky, vodka con maracuyá, anisado. Estos dulces son elaborados por ‘Mistelas Jiménez’. “Según cuenta la historia, en la colonia, existía un licor elaborado con frutas maceradas que se usaba también como medicina, poco a poco se transformó en caramelo y se le dio el nombre de mistelas”, estas delicias cuestan las 12 unidades 2,50 dólares y las 24 en 3,50 dólares.

Consuelo Ñacato, del emprendimiento ‘Cositas para picar’, dice que “nosotros queremos dar a conocer la cultura y tradiciones de Quito y sobre todo que la gente y las nuevas generaciones conozcan lo que se consumía antiguamente. Ya no se conocen las ‘manzanitas silvestres’, el jucho, el pastel de maduro y todo lo que nuestros ancestros preparaban en leña y tiesto”.

Los dulces tradicionales forman parte del patrimonio inmaterial del país, muchos de ellos son elaborados a partir de ingredientes propios de la gastronomía típica de Quito y el Ecuador. Además, las técnicas, métodos y herramientas utilizados en la elaboración de estas delicias como cucharas de palo y pailas de bronce, les dan a los dulces un valor único, y se convierten en testigos vivos de épocas que se niegan a morir.

Irma Pazmiño, del emprendimiento ‘La Reinita’, produce turrones, con almendras, macadamías, maní, además de gomas de diferentes sabores y con vitamina C, uno de los dulces es el ‘huevito de faldiquera’ elaborado con máchica “es un producto que está cubierto de merengue, las mujeres para ir a trabajar cosían un bolsillito en su falda y allí guardaban los dulces, para consumirlo en sus labores de campo”, dijo que es necesario incentivar a la gente a consumir los productos ecuatorianos.

El Municipio de Quito invita a ser parte de esta experiencia para celebrar la Fundación Española de la capital del Ecuador. Los visitantes deben mantener todas las medidas de bioseguridad, uso de mascarilla, uso de gel antibacterial, lavado de manos y el distanciamiento social.

El Museo de la Ciudad se encuentra ubicado en las calles García Moreno y Rocafuerte, junto al Arco de la Reina.

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