Si los niños sueñan, Quito también
- Quito en los ojos de los niños: una ciudad soñada por sus estudiantes
Quito (Quito Informa).- Por el Día de la Niñez, tres voces del sistema educativo municipal comparten cómo imaginan a la capital en el futuro y lo que significa para ellos vivir su infancia.
La mañana en la escuela se llenó de risas y sueños. Nos sentamos a conversar con Emilio, Isis y Joel, tres estudiantes de la Unidad Educativa Municipal Sucre, quienes, con la sinceridad y ternura propias de su edad, se tomaron unos minutos para contarnos cómo sueñan a Quito en los años venideros. Sus respuestas, más allá de la inocencia, revelan una sensibilidad profunda por el entorno y por los desafíos de la ciudad.
Emilio, con una sonrisa amplia y un amor notable por la naturaleza, no dudó en responder: “Yo quiero que la naturaleza siempre sea la protagonista en Quito”. Imagina parques infinitos, árboles frondosos y calles limpias en las que caminar se sienta como andar entre jardines.
Isis, con la seriedad de quien observa el mundo con atención, sueña con un Quito que cuide más su medio ambiente. “Quiero que las personas no boten basura en el piso y que las plantas estén felices”, dice con dulzura. Y aunque confiesa entre risas que no le gustan las verduras, su visión ecológica nos recuerda que el futuro sostenible empieza desde el pensamiento infantil.
Joel, el más enérgico del grupo, tiene un deseo claro y urgente: “Quisiera que no haya delincuencia”. Su anhelo por una ciudad segura, donde todos puedan jugar sin miedo y caminar tranquilos por el barrio, nos confronta con la realidad que muchas veces los adultos dejamos pasar. Joel sueña con un Quito de paz, de juegos en las veredas y de confianza entre vecinos.
Cuando les preguntamos sobre su niñez, Emilio no dudó en decir que lo que más disfruta es pasar tiempo con sus amigos y su profesora. Joel, fiel a su espíritu inquieto, dijo simplemente: “A mí me gusta jugar”. Isis, sincera como solo una niña puede serlo, afirmó entre risas que lo único que no le gusta… son las verduras.
Este 1 de junio, los estudiantes del sistema educativo municipal nos recuerdan que la ciudad del futuro no está tan lejos, vive en cada una de sus palabras, en cada uno de sus dibujos y en cada uno de sus sueños. Escucharlos es tambien empezar a construir ese Quito mejor, más verde, más seguro y humano que tanto merecen.
Porque el presente de la ciudad camina de la mano de su infancia. Y si los niños sueñan, Quito también.