Se entregaron permisos para comerciantes de difuntos
El Municipio Metropolitano de Quito a través de la Administración Zona Manuela Sáenz (AZMS), entregó, la tarde del lunes 28 de octubre, alrededor de 185 permisos a los comerciantes históricos que ocupan el espacio público, para el feriado de Difuntos. Con el propósito de mantener el orden y una correcta imagen urbana en los alrededores de los cementerios de San Diego, El Tejar y Guápulo.
“Para cumplir con la normativa vigente, la Administración Centro procedió a otorgar permisos a los comerciantes que son parte del catastro histórico de la época de finados y son los únicos que pueden hacer uso del espacio público en estas fechas pues la Municipalidad, no autorizará nuevos permisos. Está terminantemente prohibido el incremento de más ventas”, aseveró Sandy Campaña, administradora de la Zona Manuela Sáenz.
El permiso, contribuye para que la Agencia Metropolitana de Control (AMC), realice una adecuada revisión de los comerciantes que se ubican en el Feriado de Difuntos en los tres cementerios del centro y son los vendedores que justifican su actividad con el Permiso Municipal emitido en el año 1997 o el carné entregado el año anterior, informó Eduardo Maldonado, responsable de la Unidad de Espacio Público de la AZMS.
De acuerdo a las indicaciones entregadas a los vendedores, no existen permisos nuevos de ocupación del espacio público, por lo que, tanto la AMC, como los agentes metropolitanos de control, mantendrán una estricta verificación de los permisos y los comerciantes deberán mantener los mismos sitios asignados en la distribución del año anterior a partir del viernes 1 hasta el 4 de noviembre.
Según las disposiciones municipales los vendedores de comida preparada deberán colocar elementos de madera debajo de las carpas a fin de proteger aceras, calzadas y la piedra colocada en la Plaza de San Diego; además deben utilizar mandiles y gorro de acuerdo al color que la asociación haya decidido para observar uniformidad y contar con un basurero.
Está prohibido cocinar o preparar alimentos en el espacio público asignado y arrojar baldes de agua en el espacio público.
La comerciante Katy Caiza Rivera, que estará ubicada en el cementerio de San Diego, considera que es muy bueno el otorgamiento de los permisos a los vendedores históricos, porque de lo contrario aparecen muchas ventas que no cuentan con permisos municipales y se ubican como quiera ocasionando desorden y ejerciendo ilegalmente esta actividad.