IMP nombra a nuevos Guardianes del Patrimonio
El Instituto Metropolitano de Patrimonio –IMP- designó el jueves 15 julio, a nuevos ‘Guardines de Patrimonio, está vez para reconocer el trabajo de empresarios y promotores del Centro Histórico, quienes han fomentado la difusión de los valores patrimoniales. La actividad se realizó en el Restaurante La Caponata.
Guardianes del Patrimonio es un proyecto creado para reconocer a los diferentes actores y gestores culturales que se desempeñan en el Distrito Metropolitano de Quito, además, promueve los valores culturales, patrimoniales y a su vez es un compromiso con los gestores y las instituciones para conservar el patrimonio e identidad de nuestra ciudad.
Los reconocidos, esta semana, como Guardianes del Patrimonio han demostrado su trabajo y esfuerzo por mantener sus negocios en funcionamiento, lo que ha permitido que el Centro Histórico se mantenga vivo, y gracias su accionar fomentan la cultura y la identidad.
Los reconocimientos fueron para:
- La Caponata
- En Dulce
- Vista del Ángel
- Bocanata
- Hotel Casa Gardenia
- Sereno Moreno
- Café Mosaico
- Cafetería Siete Campanarios
- Hotel Villa Colonna
- Fundación Muñoz Mariño
- La Purísima
- Hotel Plaza Victoria
- Chuta Madre
- Centro Cultural Salsa para el barrio
- Hotel Basílica
“En las siguientes semanas nuevos guardianes se unirán a este gran proyecto que busca la conservación y difusión del gran patrimonio que tiene la ciudad”, manifestó Raúl Codena, director ejecutivo del IMP.
El nombramiento de Guardianes del Patrimonio constituye también la conformación de una red de trabajo conjunto entre el Municipio de Quito y los diversos actores reconocidos. Esta red también involucra una cooperación entre los ‘Guardianes del Patrimonio’ para la consolidación de proyectos en beneficio conjunto.
-
IMP nombra a nuevos Guardines del Patrimonio
Excelente iniciativa y se van sumando más gente para cuidar el centro histórico de Quito
La Caponata es un lugar que despierta ilusión por el objetivo que tiene: mantener en armonía el pasado con el presente. Se trata de promover cultura democrática pero con refinamiento. Los artesanos-artistas trabajan en sus distintos áreas, se reconoce aquí la habilidad de las manos, el vuelo de las ideas, el trato amable con la gente. En el primer piso está el restaurante alrededor de un patio interior que tiene de una época pasada vivida intensamente, tan intensamente que hasta ahora se nota. En el segundo piso el zapatero confecciona zapatos en un sitio mágico con espejos que crean espacios irreales donde los zapatos dan sus primeros pasos, un diseñador con cierta melancolía que imprime sus sueños de una vida que se va inexorablemente al futuro pero que van protegidos con una ternura grande.