Municipio interviene en 4 sectores para mitigar taludes

El Municipio de Quito, a través de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas, – Epmmop- interviene en los sectores de Pomasqui, El Conde, el Tránsito de Chillogallo y Gualo como parte del monitoreo permanentemente que realiza en las vías adyacentes a las quebradas y taludes para resguardar la seguridad ciudadana.

En enero de 2020, comenzó la recuperación de la mesa vial en la Av. El Tránsito, que se encuentra junto a la quebrada Río Grande, en el sector de Chillogallo. Se construye un muro de gaviones de cinco metros de altura, relleno y reconstrucción de la mesa para lo cual se utiliza material pétreo.

Actualmente, las labores se concentran en el encofrado que servirá de base para fundir la acera en sentido de norte – sur; en el otro sentido está en condiciones adecuadas y seguras para el peatón.

Posteriormente se colocarán 23 metros de pasamanos, pavimento asfáltico en la vía y señalización horizontal y vertical. El cierre vial se mantiene sobre la avenida El Tránsito, por lo cual se recomienda a los conductores usar rutas alternas como las calles Carlos Freile y S34L.

En Pomasqui, al norte de la ciudad, se estabiliza el talud lateral ubicado en la calle José de la Cuadra para recuperar la mesa de la vía y garantizar la seguridad de conductores y peatones que transitan por la zona.

Las tareas consisten en estabilizar dos secciones de este talud:  la una de 45 metros donde se construye un muro de 2.50m de alto por 2m de ancho y la otra sección de 51m en la que se implementa un muro de gaviones de 2.5m de alto por 2m de ancho.

De igual forma se realizan trabajos de mitigación en el talud inferior de la calle E3F, ubicada en el sector El Conde, en la quebrada de Caupicho, en este lugar se colocan rocas en una longitud aproximada de 110 metros para estabilizar definitivamente el talud. En la zona está restringido el paso vehicular.

En las quebradas Seca y Chaquisahuayco, ubicadas sobre la Av. Simón Bolívar, en el tramo que comprende el intercambiador de Carapungo y el redondel de Gualo, se construyen dos torres de prevención de embalsamientos que servirán para evitar que el cauce del agua en las quebradas afecte a los taludes aledaños cuando sube de nivel.

La torre que se construye en la quebrada Seca tiene 13.20 metros de altura, mientras que en la quebrada de Chaquishahuaycu alcanza 9.2m.  Se realizan trabajos de protección de los taludes para recubrir las paredes laterales aledañas a la torre con hormigón. Se estima que las obras finalicen en mayo de 2020.