Municipio de Quito trabaja junto con el Banco de Alimentos para atender a las comunidades en situación de vulnerabilidad alimentaria

Con el fin de reducir la malnutrición en la población identificada, la Secretaria de Salud se articula al Banco de Alimentos de Quito (BAQ) para direccionar a la población referida con inseguridad alimentaria y que viven en hogares en situación de pobreza y pobreza extrema para que puedan beneficiarse del suministro de alimentos que éste provee.

Los bancos de alimentos son una solución comprobada para alimentar a las comunidades en situación de vulnerabilidad alimentaria, a través de acciones concretas y comprometidas. En la actualidad, el BAQ brinda su ayuda 2500 personas que se benefician con el expendio de los alimentos. Por su parte, la Secretaria de Salud creará comedores comunitarios en coordinación con CONQUITO, la Agencia Coordinadora Distrital de Comercio y las diferentes administraciones zonales para que los alimentos puedan ser preparados y servidos a quienes más los necesitan en el Distrito Metropolitano de Quito (MDQ).

En la actualidad, la Secretaría de Salud del Municipio de Quito trabaja con Equipos de Salud Comunitaria, quienes desarrollan acciones que permiten identificar y visibilizar a niños, niñas, mujeres gestantes con malnutrición; utilizando herramientas de tamizaje para obtener datos antropométricos de peso, talla, perímetro cefálico (menores de 2 años) y datos bioquímicos como la hemoglobina capilar.

Además de los datos antropométricos y bioquímicos, el equipo de nutricionistas evalúa otras  determinantes sociales, ambientales y de salud que inciden directa o indirectamente en la presencia de malnutrición, para ello, se lleva a cabo la Encuesta Latinoamericana Caribeña de Seguridad Alimentaria (ELCSA) para identificar el nivel de inseguridad alimentaria en los hogares y la Encuesta de Ingresos Económicos, a través de la Canasta Vital, a fin de analizar la relación del ingreso promedio de una familia con el costo referencial de la canasta vital lo que permite establecer la brecha existente entre estos dos rubros.

En lo que va del año 2022, del total de hogares visitados por los Equipos de Salud Comunitaria, el 46% corresponde a hogares pobres o con extrema pobreza. Esto indica que no llegan a cubrir una alimentación suficiente y adecuada, por lo que requieren de esta asistencia alimentaria.

Los hogares identificados, cuentan con el acompañamiento permanente de las y los nutricionistas, quienes se encargan de vigilar su estado nutricional, educar en alimentación saludable, agua segura, higiene del hogar, manipulación de alimentos y creación de huertos orgánicos para la producción de alimentos saludables en casa.

La intervención integral por parte de la Secretaría de Salud, permitirá reducir y prevenir la malnutrición de población vulnerable en el DMQ.