Inspiración en acción: María Vega barre las barreras del tiempo y la edad

Quito, 12 de diciembre de 2024 (Quito Informa).-  Su jornada comienza antes del amanecer. A las 03h00, entre oraciones y agradecimientos por la vida, inicia su día. Tras preparar el desayuno para su familia, sale a las 04h30 rumbo al ‘cuartelillo’ en la avenida Occidental, lista para cumplir con su misión: mantener limpias las calles del Centro Histórico de Quito, pero María Vega es más que una barrendera; es madre, trabajadora incansable y un ejemplo de superación.

Con 18 años de servicio en Emaseo, su labor fue reconocida en la sesión solemne por los 490 años de la fundación de San Francisco de Quito, donde recibió el galardón Carlos Montúfar, una distinción otorgada a quienes dedican su vida al servicio de la ciudad.

“Ese momento me llenó de alegría, fue una emoción indescriptible que reconozcan nuestro trabajo. Somos obreras de barrido y recolección”, cuenta María con una sonrisa que refleja orgullo y gratitud.

María no solo barre las calles también barre las barreras del tiempo y la edad. A sus 35 años decidió retomar los estudios. Cada lunes, miércoles y viernes, junto con otros 39 compañeros, asiste al aula móvil de Emaseo para completar el bachillerato, un sueño que se hará realidad en 10 meses. “Regresar a estudiar fue un desafío. Pensé que no podría, pero me di cuenta de que los límites los ponemos nosotros mismos. Siempre les digo a las mujeres: sí podemos. No importa la edad, lo que importa son las ganas y la actitud para salir adelante”, dice con convicción.

Su cuadrante, que abarca las calles Guayaquil, Espejo, Montúfar y Borrero, es su espacio de batalla diaria contra la basura. “No solo es limpiar, es repasar para que las calles estén impecables”, explica. Aunque reconoce que las personas han comenzado a ser más conscientes sobre el manejo de residuos, ella sabe que la educación es clave para mantener a Quito limpio.

María agradece cada día por su trabajo. “Todo lo que hago, lo hago con amor: por mis hijos, por mí misma, por mi empresa, por mi ciudad”, afirma. Y cuando las fuerzas flaquean, encuentra inspiración en una frase de Aristóteles que la impulsa: «Considero más valiente al que conquista sus deseos que al que conquista a sus enemigos, ya que la victoria más dura es la victoria sobre uno mismo».

María Vega no solo limpia calles; también embellece con su ejemplo el corazón de quienes tienen el privilegio de conocerla.

 

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