Varios actores se unieron en jornada de reforestación
El Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, por intermedio de la Administración Zonal Eugenio Espejo, en cooperación con la comunidad del sector y el voluntariado del Banco Solidario realizó la reforestación en la quebrada Poroto Huayco, en el mes de noviembre.
En San Isidro del Inca se encuentra la quebrada Poroto Huayco, desde tempranas horas se dieron cita personal voluntario de Banco Solidario, quienes estuvieron muy emocionados para la jornada de reforestación en conjunto con la comunidad y personal de la Unidad de Ambiente de la Administración Zonal, esto en el marco de cooperación interinstitucional entre la zonal y la empresa privada.
Amparo Sánchez, moradora del sector junto a otras personas recogían basura mientras los voluntarios y el equipo municipal perforaban los huecos y sembraban arboles de cerezo, fresno, acacia, guaba y jacarandá. Ella comentó que sembró 3 arbolitos siguiendo el ejemplo de Ana Lucía Herrera, vecina que murió hace tres años.
El hijo de Ana Lucía, Matías García, también quiso seguir el ejemplo de su madre y estuvo en la siembra, colaborando incluso con bebidas para los participantes. “Es una cadena, unos empiezan a cuidar y el resto sigue, o al menos no daña más” – dijo César Veloz, técnico del municipio quien también participó en la siembra de la quebrada Habas Corral con los Voluntarios Solidarios. “Está lindo ahí, ya verificamos y están creciendo los árboles que sembraron.”
Nancy Flores, colaboradora de El Ejido, señaló que vio la convocatoria anterior y no pudo participar; dijo “¡Ésta me voy!” Según Nancy, “me gusta la Naturaleza, y salir un poco del ambiente laboral es bueno. Han sido meses duros de mucho trabajo y un espacio distinto era necesario.”
El enemigo de los árboles y el suelo es el eucalipto, indicó Marco Romo. Sucede que en todo el Ecuador hay esa especie, por lo cual hay que ir reemplazando por plantas nativas. “Aún si es eucalipto, donde hay verde, uno se siente bien. Fíjense aquí cómo cantan los pájaros pese a ser un área intervenida. Las terrazas y jardines regulan la temperatura de los edificios y ayudan a la salud mental y física de sus habitantes”.
Angélica Lema, también técnica de jardinería del Municipio, indicó que ha sembrado por toda la ciudad. Su mejor obra ha sido en Atucucho. “Le están cuidando y le tienen limpiecito” – afirmó.
De su lado Marlene Pérez, auditora de la entidad financiera, sostuvo que a pesar del frío, la experiencia fue inolvidable, sobre todo “el poner un granito de arena para cuidar el planeta”, añadió que el banco siempre les motiva a participar e ir incorporando a nuevos compañeros en las campañas con responsabilidad social. Acotó que sembró varios árboles del total de 54 que se sembraron.
Rocío Romero, consultor de RRHH, manifestó que “fue una experiencia muy chévere, de mucha camaradería, se vive un trabajo en equipo, (…) con el objetivo de recuperar nuestros bosques”, resaltó el compromiso de la comunidad por cuidar de los árboles.
Marlene, Juan, Vanessa, Evelyn, Adriana, Evin, también estuvieron muy contentos con la actividad, frases como estas emitieron ya al regreso, después de una ardua jornada de reforestación: «Siento el entusiasmo de mantener el planeta», «Una bonita experiencia, me cansé, pero despejé la mente, esparcimiento y solidaridad con la comunidad, no siempre esperes cosechar lo que cultivas». «Es solo cuestión de tener hábitos buenos, sembrar con amor es dejar tu huella para la vida», fueron algunos de los comentarios.