Con el mantenimiento de luces evite sanciones, siniestros y condicionarse de la RTV

Ante el acelerado ritmo de crecimiento de la sociedad, el automóvil se ha convertido en un medio de transporte de gran utilidad para el desarrollo de diversas actividades. Contar con un auto en condiciones adecuadas contribuye a la seguridad vial e incide en la disminución de siniestros de la capital y del país.

Estudios revelan que la capacidad de reacción del conductor depende en un 90% de la visión, es por ello que las luces, conforman un elemento de seguridad vital, permiten que el resto de los conductores y peatones puedan prever la cercanía de otros automotores o actores viales.

Es por esta razón que, la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), incita a la ciudadanía realizar el mantenimiento de las luces del vehículo para verificar que estén en óptimas condiciones y así evitar siniestros y sanciones. Además, dentro sus competencias de control, la AMT verifica el buen funcionamiento de las mismas a través de operativos y mediante la Revisión Técnica Vehicular, RTV.

Para un buen mantenimiento del sistema de iluminación es necesario hacer revisiones periódicas de los faros delanteros y posteriores, ya que con el uso estos tienden a opacarse.

En el caso que un agente civil de tránsito  (ACT) verifique el mal estado o funcionamiento de las luces, la sanción establecida en el art. 390-14 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) es del 15 por ciento de un salario básico unificado del trabajador general, SBU, (USD 65).

 El Reglamento a la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, en el art.185 establece que “todo vehículo deberá llevar sus luces encendidas, entre las 18:00 y las 06:00 del día siguiente y, obligatoriamente, entre las 06:00 y las 18:00, si las condiciones atmosféricas (neblina, lluvia,) lo exigen. Quien incumpla esta normativa será sancionado con el 10 por ciento de un SBU, (USD 45), según lo determina el art. 391–14 del COIP.

Un vehículo cuenta con las siguientes luces, mismas que los conductores deberán verificar antes de salir:

Luces testigos.- Nos indican un correcto funcionamiento del motor, del sistema eléctrico, del sistema de lubricación, etc. Si una de estas luces falla, quiere decir que hay una avería en los sistemas antes mencionados.

Luces de posición.– Son de color naranja, y destellantes, indican la dirección en la que va un automotor como: derecha, izquierda, estacionamiento. Siempre se deben utilizar estás luces, al momento de la circulación, para prevenir a los conductores que están detrás.

Luces de carretera.- Son las luces principales, sirven para iluminar todo lo que está frente al automotor cuando todo está oscuro. Se dividen en luces altas, luces guías y luces medias, cada uno de este tipo de luz se utiliza de acuerdo con el grado de visibilidad del conductor.

Luces de frenado.– Se encienden con mayor intensidad cuando el conductor presiona el pedal del freno, su correcto funcionamiento avisa a los conductores que vienen detrás que tomen su distancia de seguridad para que no choquen.

Luces de reversa.- Se encienden cuando el automotor cambia el sentido de su marcha, por lo general para estacionarse, son de color ámbar.

Además, es importante realizar el cambio de luces de intensas a medias, en condiciones de oscuridad y lluvia es fácil que el conductor que viene del otro sentido se deslumbre por la intensidad de la luz, para ello se debe ejecutar el cambio de luces aproximadamente a 500 metros de distancia del otro automotor.

Recordamos a la ciudadanía que el mal funcionamiento de las luces es considerado un defecto tipo II y tipo III, según el daño que presenten, el vehículo es condicionado en la RTV.

 Otro factor a considerar es el cableado, siempre debe estar aislado correctamente para no generar ningún tipo de corto circuito.

Como institución se hace un llamado a la corresponsabilidad ciudadana en la vía.

¡Juntos hacemos seguridad vial!

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