Restauración de la quebrada en Llano Chico previene deslizamientos
Quito, (Quito Informa). – En el norte de Quito, vecinos del sector La Bota y técnicos ambientales se unieron para devolverle la vida a un tramo de la quebrada San Antonio, en Llano Chico (norte). Con palas, picos y muchas ganas, durante cuatro mingas lograron avanzar en la restauración de este ecosistema que había sido afectado por la erosión y el riesgo de deslizamientos.
La zona fue identificada como una de las más vulnerables del Distrito ante los efectos del cambio climático, debido a su geología inestable y a las pronunciadas pendientes. Por eso, en lugar de dejar que el deterioro avance, se optó por una solución natural, restaurar dos hectáreas con plantas nativas que ayuden a sostener el suelo y retener la humedad.
Con la ayuda de unas 80 personas, se sembraron 845 árboles y arbustos de especies como guantugsillo, chilca, cabuya, pumamaki, capulí, mimosa quitensis, guaba, tilo, cholán, sacha capulí y yalomán. Además de plantar, se enriqueció el suelo con tierra abonada, biocarbón y polímeros que retienen el agua, lo que permite que las nuevas plantas crezcan con fuerza.
¿Cuánto invierte la capital en limpieza de quebradas?
Este trabajo conjunto entre comunidad y técnicos es un ejemplo de cómo pequeñas acciones pueden ayudar a enfrentar los efectos del cambio climático y a proteger el entorno natural del norte de la ciudad.
La intervención, liderada por la Secretaría de Ambiente y realizada con el apoyo de la comunidad, la Administración Zonal Calderón y el GAD parroquial de Llano Chico, también incluyó la limpieza de escombros y el cercado de los márgenes de la quebrada, fortaleciendo la prevención de riesgos y fomentando la recuperación ecológica tras incendios forestales recientes, beneficiando a aproximadamente 4.000 personas.