Museo de Sitio del MIC fue inaugurado por el Municipio

La Alcaldía de Quito y el Museo Interactivo de Ciencia (MIC), presentaron al Museo de Sitio totalmente renovado. La muestra que permite el acceso a nuevos paradigmas de apropiación del museo a través de la tecnología, reunió a 265 personas que disfrutaron de la nueva exposición y participaron de una caminata por Chimbacalle, barrio emblemático de la ciudad.

Las pintorescas calles y edificaciones de Chimbacalle evidencian aún el pasado industrial de la capital, cuyo hito más sobresaliente fue la llegada del ferrocarril a Quito en 1908. Veintisiete años después de este histórico suceso, y como parte de la expansión de la industria textil en el Ecuador, se fundó en 1935 la Fábrica de Hilados y Tejidos de Algodón La Industrial, la misma que funcionó hasta 1999, y cuyas instalaciones hoy forman parte del MIC.

Con el objetivo de rescatar parte de este pasado obrero, en el 2008 se utilizó el área de telares de la ex fábrica para crear una instalación artística multisensorial que permita revivir un momento de la vida laboral de inicios del siglo XX. Tras nueve años de funcionamiento, la propuesta se renovó para convertirse en un escenario vanguardista de rescate del patrimonio cultural inmaterial del barrio y de Quito.

La inauguración se encendió a través de un show de vídeo mapping con ocho diferentes reproducciones, que en un ambiente rústico y misterioso, revivió el pasado obrero de las jornadas de trabajo. Mientras tanto, luces robóticas se activaban por ciertas máquinas textiles, para disfrutar de una sinfonía tecnológica.

La implementación de componentes de realidad aumentada e interacción multimedia, es otro los principales cambios de la muestra. Con ayuda de la aplicación MIC Museo –de descarga gratuita-, los invitados pudieron interactuar con personajes virtuales, como La Obrerita y el Robot MIC. Estos singulares mediadores entregaron datos curiosos al público, que no se encentraban a simple vista.

En las cédulas explicativas, la presencia de códigos QR, ampliaron la información y gráficas multimedia de los objetos del recorrido. Especialmente, sobre cómo funcionó la fábrica en sus procesos de hilado y tejido. Los participantes disfrutaron de una experiencia multimedia con ayuda de sus dispositivos móviles.

Finalmente, uno de los espacios más destacados de la propuesta fue el renovado cuarto de testimonios. Un lugar donde los visitantes pudieron compartir sus anécdotas en relación al recorrido, o sus historias familiares sobre La Industrial.

Se realizó una caminata inaugural porque el MIC es parte de varios sitios emblemáticos que tiene el barrio Chimbacalle y que lo hacen único en la ciudad. Este barrio con tanta historia tiene una dinámica muy particular. Está lleno de gente entusiasta que ama su barrio, sus gestores barriales están completamente comprometidos con su entorno y tiene locaciones que solo se pueden encontrar en Chimbacalle. El MIC se une con Ferrocarriles del Ecuador y con el Teatro México para mostrar la historia del barrio.

La caminata es parte del proyecto “Chimbacalle, chaquiñanes y recuerdos” que el MIC lleva adelante en conjunto con sus socios estratégicos.

La Imprenta y el Vagón del Arte de los Ferrocarriles del Ecuador estuvieron en la ruta del recorrido. Estos lugares formaron parte de la segunda estación de la caminata, cuyos guías turísticos fueron los mismos moradores del barrio. Posteriormente, los visitantes caminaron hacia el Teatro México para disfrutar de una presentación musical a cargo de la Banda Municipal Ensamble y terminar la noche con un cóctel de cierre.

Evocar estos acontecimientos no solo contribuyen a la recuperación de la memoria ciudadana, también aportan al fortalecimiento de nuestra identidad como quiteños y ecuatorianos, la cual se forjó en procesos históricos, sociales, económicos, políticos e industriales. Así, estos relatos funcionan como un espejo que nos permiten analizar el pasado, posicionarnos en el presente y re inventarnos en el futuro.

La comunidad de vecinos del MIC, en especial los miembros del Corredor Chimbacalle, jugaron un valioso rol en la generación de contenidos. Gracias a líderes comunitarios se logró reunir nuevas visiones y enfoques de reflexión sobre los derechos laborales, la discriminación e inequidad entre hombres y mujeres en la remuneración o el sentido de familia.

A través de esta visión social y participativa, también se habla sobre el valor del turismo comunitario, que aprovecha la historia del sector para propiciar su dinamismo de tradiciones y comercio local.